viernes, 15 de marzo de 2013

No aún


A estas alturas de la noche, donde la droga es el cansancio, y el vaivén de los muslos y las caderas es como ir al mar y al volver a casa sentir la sensación de las olas/
Donde seis horas de camino, buses, música, accidentes, risas, sueño, ansiedad, sólo representan una vuelta a casa para decir "nos vemos pronto..."/ 
Donde todo el cuerpo produjo espasmos y erecciones -erecciones perfectas: pezones, pene, pena, penetraciones.../
El vello corporal ausente y presente, el cabello derrotado entre puños de lujuria, esparcidos entre el piso, el mueble de la pequeña sala con los cuadros de lanchas y montañas, en la cocina donde no preparamos nada, en el baño... /
A esta hora de la siguiente noche en que nos dibujo, digo: son recuerdos que recorremos con palabras e imágenes, que iniciaremos de nuevo con cada ciclo en otra salida de casa, para seis horas de buses, seis niveles de risa, de pálpito y descanso

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