lunes, 11 de octubre de 2010

El Sofá

 Así de pronto alguien, que aparece de la nada, te hace sentir, de la nada, te hace escribir, de la nada, pocas frases que se llevan desde el corazón a una respuesta sincera… Preguntas que no relacioné más que con el amor. Yo, incomprensible y abstracta, como siempre.

Quiero que me acompañes
Luego de volver de tu trabajo,
Cada noche
En un pequeño sofá
Que compremos
para estar más cerca…

Si me dices que sí quieres casarte conmigo
Ahora mismo me invento
Colores cálidos y cómodos
Para concentrar nuestro amor.

Me hago un inventario
de tormentos y risas,
de sudor y helado derramado
para este sofá.

Dime cuando te vienes
A hacer incandescente la esquina
De mi oscuridad
Y sentémonos hoy mismo en el sofá
A planear
La eternidad de nuestra vida.

4 comentarios:

Ktaná dijo...

Lu , paso a verte de curiosa , porque me llamó la atención tus palabras , me encantó tu blog ,tus escritos son muy buenos , la esencia de una verdadera mujer , en cada palabra tuya . ¿no te molesta que revise las publicaciones antiguas ? , leere un poco mas por aquí
Besos desde Viña del mar

Titomon dijo...

Entrega todo el sexo, al fin de cuenta el no duele tanto como duele una cogida al corazón..

T.

Juan Camilo dijo...

Él sospecha que ella lo espera pero no está segura de cuánto tiempo durará la magia. Pero siente que es ella la que lo salvará de la cara oscura de la luna

Quisiera que no te esfumaras tras el beso
Quisiera que después del abrazo no desaparecieras para siempre
Quisiera invirtarte a cenar a mi circuito de heridas
Quisiera que me besaras con el egoismo del amor
Quisiera que la eternidad, hoy,
fuera nuestras miradas
Quisiera caminar contigo por
las playas del caribe
Quisiera que antes del matrimonio
nos casaramos mil veces.

Enrique M. Picchio dijo...

Como me hubiera gustado que una bella mujer me invitara a compartir un sofá como lo planteas en este poema, me gustó mucho besotes-